El Rey Carlos y Camila Parker ponen tierra de por medio tras la última estocada de Enrique

A dos meses de la Coronación, el Rey Carlos y su esposa, Camila Parker-Bowles, hacen las maletas para un viaje muy especial. Tal como han confirmado fuentes oficiales del Palacio de Buckingham, el monarca y su mujer tienen previsto un viaje oficial a Francia y Alemania, para celebrar las relaciones bilaterales de ambos países con el Reino Unido, así como su historia, cultura y valores compartidos. Un viaje que, según se ha anunciado, se llevará a cabo entre los días 26 y 31 de marzo, en la última semana de este mes.

Se trata del primer viaje de estas características del monarca y su esposa desde la muerte de la Reina Isabel el pasado mes de septiembre y desde que Carlos III haya asumido la jefatura del Estado. Por tanto, más allá de la importancia que siempre tienen este tipo de desplazamientos, en este caso la relevancia es aún mayor por este motivo.

Aunque todavía no han trascendido muchos detalles sobre este viaje, sí se sabe que la visita se produce después de que tanto los presidentes de Francia como de Alemania hayan extendido una invitación al monarca que, según se ha podido saber, será el primer rey británico en dar un discurso ante los senadores y miembros de la Asamblea Nacional del Senado de Francia, así como ante el Bundestag alemán.

El rey será el primer monarca británico en dar un discurso a los senadores y miembros de la asamblea nacional de la cámara del Senado de Francia y el primero en dirigirse a los políticos alemanes del Bundestag.

Este viaje se ha anunciado casi al tiempo de la última entrevista del duque de Sussex, en la que arremete duramente contra su padre, tras conocerse la noticia del desalojo de Frogmore Cottage. Por ahora no se sabe si Enrique y Meghan acudirán a la Coronación, aunque sí se sabe que han sido invitados formalmente.

Esta visita «es una oportunidad para mirar hacia adelante y mostrar las muchas formas en que nuestros países están trabajando en asociación, ya sea para abordar el cambio climático, responder al conflicto en Ucrania, aprovechar las oportunidades comerciales y de inversión o compartir lo mejor de nuestras artes y cultura», han comentado fuentes oficiales del Palacio de Buckingham que, además, han resaltado que, durante el viaje, no faltarán las ocasiones en las que se pueda reflexionar sobre los sacrificios y desafíos de nuestro pasado compartido, del cual ha surgido un legado perdurable de cooperación y reconciliación. Pese a que el programa completo de la visita no ha trascendido, se espera que una de las cuestiones fundamentales de este viaje sea la sostenibilidad, uno de los temas que más preocupa al monarca.

Hace unos días, Carlos III se reunió en el Castillo de Windsor con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, poco después de que se hiciera público el nuevo  acuerdo marco alcanzado entre Reino Unido y la Unión Europea (UE) para reformar el Protocolo de Irlanda del Norte. Un encuentro que no ha estado exento de críticas, a pesar de que, desde Buckingham, han dejado claro que la reunión había sido organizada siguiendo asesoramiento del Gobierno de Londres, aunque por deseo del Rey. No obstante, algunos diputados han declarado que resulta  «constitucionalmente imprudente involucrar al monarca en un asunto de inmediata controversia política».